FF: "Nightmares" Purple Sky! 1° Parte

Nightmares

Después de tanto tiempo, he aqui el siguiente capitulo, el No. 5 y esta dividido en 3 partes.

GIZEM POV

No se me borro de la mente la mirada del papá de Nessie, me veía muy molesto como si hubiera hecho algo malo; pero no había hecho algo malo o al menos no que yo recordara. Nos sentamos en una amplia mesa de caoba realmente se veía hermosa toda su casa como si un profesional la hubiera decorado. Sus tíos se sentaron pero sus padres se fueron a la cocina.

-No se para que van a la cocina si traje todos los platillos a la mesa – dijo una de las tías de Nessie, me parecía que se llamaba Rosalie.

-Tal vez fueron a cocinar otra cosa – había dicho su musculoso tío, me daba un poco de miedo la fuerza que seguramente debía tener.

Mire a Nessie con una sonrisa tímida, me sentía cohibida en esta casa como si toda las miradas estuvieran sobre mi pero había algo que me hacía sentir como en casa, como si mis problemas emocionales se desvanecieran, sonaría extraño para cualquiera pero me daba miedo esa sensación dado que yo no recordaba cómo era sentirse en casa.

-Espero que te guste la comida Gizem, mi linda hermanita se esmero mucho, se levanto desde temprano para hacerla – dijo Alice.

-Gracias por la comida, no era necesario, por lo regular solo como ensaladas y puré de papa porque eso es lo único que la tía Judith sabe hacer – recordé mi primer mes en su casa, al final de la semana me había dado cuenta que ese sería mi alimento durante el resto de mi estancia en su casa. Alguna vez ella había dicho que no le daba tiempo de cocinar algo más difícil porque tenía que trabajar. – Aunque también prepara sopas los fines de semana – no podía quejarme después de todo yo era una intrusa en su casa y ella ya estaba acostumbrada a cocinar para uno.

-En ese caso puedes venir a comer todas las veces que quieras Gizem, insisto, así tú y Nessie podrán hacer sus tareas juntas y después les puedo dar consejos sobre chicos, ya saben un buen prospecto uno que tenga un buen futuro – sentí que mis mejillas se ruborizaban, no me imaginaba recibiendo consejos de la tía de mi amiga.

-¡Rosalie que te sucede!, como platica de chicos, ni hablar, podremos ¡ir de compras!, ¿se lo imaginan? Podríamos pasar todas las tardes buscando nuevos diseños que puedan modelar en la escuela, serian la envidia de ¡todas! – si antes me daba un poco de miedo Alice ahora me estaba dando terror, pude soportar ir de compras porque jamás lo había hecho pero no quería pasarme todas las tardes siendo un maniquí y que alguien me diga que con un vestido o una diadema como la que traía se me vería bien. Pero deje de escucharla por alguna razón se quedo callada con la mirada perdida viendo hacia la puerta, mire a Nessie para preguntarle pero su esposo la levanto de la silla y la encamino a la cocina.

Nessie se reía nerviosa – Es normal, no te preocupes, le pasa seguido, es algo así como si tuviera una laguna mental, pero en unos segundos se recupera – No dije nada, si ella decía que eso era no preguntaría más, además los tíos que seguían en la mesa me miraban curiosos, tal vez se preguntaban si creía que Alice estaba loca, eso podía ser posible pero no lo creía al 100%.

Termine de comer lo que parecía ser el platillo principal, le iba a preguntar a Nessie por sus padres pero Alice salió de la cocina mirándonos a Nessie y a mí.

-¿Nessie querrías enseñarle a Gizem la casa mientras terminamos de hacer el postre? – por alguna razón me parecía que por las miradas que intercambiaron me estaba perdiendo de algo pero no hubo tiempo de pensar más en ello porque un muchacho entro por una de las puertas que estaban al lado contrario de la cocina, era el que había visto con Nessie.

-Ah que bueno que llegas Jacob, ¿quieres acompañar a Nessie y a Gizem en el recorrido de la casa? – El primero miro a Nessie, y después a su tía, el simplemente dejo su mochila junto a Rosalie, me pareció muy raro como ella arrugaba su nariz y Jacob solo se reía.

-Pues creo que no me he presentado como se debe soy Jacob pero puedes decirme Jake cualquier amiga de Nessie me puede decir Jake – me levante para saludarlo pero Nessie tomo mi mano y me jalo en dirección a las escaleras.

-Jake te presentas arriba, es mejor apurarnos si quieres probar el postre favorito de mi tía Rose – me dijo Nessie mientras empezábamos a subir las escaleras.

No veía lo que pasaba en el comedor pero alcanzaba a escuchar como las sillas rápidamente se movían. Llegamos a la parte superior, habían muchísimos cuadros, pero lo que más me sorprendió fue el numero de puertas, por afuera la casa se veía grande, si, pero no taaan grande como para tener siete puertas. Mire a Nessie y a Jacob, una sonrisa se me salió, fue como un instinto al ver sus miradas era como estar viendo las novelas cursis de la tía Judith, pensaba que eso no sucedía en la vida real. Iban tomados de la mano lo que me hizo preguntar.

-¿Por qué no le han dicho a tus papás sobre…? – me interrumpieron

-Shhh! – dijeron a la vez

-Ya valimos, ya valimos Nessie, tu papa me matara, ya escuchó, estoy seguro que ya escucho si no escucho entonces Bella si y me matara dirá que no soy digno de su confianza – no había visto antes a un hombre tan preocupado como el.

-Quieres calmarte, si no habían escuchado antes pues ¿adivina qué?... Ya te escucharon!!! – ahora estoy parecía una batalla y yo la había creado.

-Lo siento, pero no creo que hayan escuchado digo ellos están abajo y nosotros arriba, no creo haber hablado tan alto o si? – bien hecho Gizem, la primera vez que te dan un secreto a guardar y lo estropeas en menos de un día.

-No es tu culpa Giz, es solo que… sonara ridículo e increíble pero mi familia tiene muy buen oído – dijo Nessie nerviosa y Jacob la miraba mordiéndose un labio.

-Sera mejor que continuemos con el recorrido, pase lo que pase estaremos juntos – dijo Jacob como si fuera el fin del mundo, me pareció muy extraño.

Caminamos por el pasillo y me fue mostrando los cuartos por los que pasábamos, el primero fue de sus tíos Emmett y Rosalie, después de Alice y Jasper, y al final del pasillo quedaban dos cuartos, el primero que me mostro fue el de sus papás, se veía muy pequeño para que fuera de ellos, había una pequeña cama y las paredes estaban cubiertas de fotos con marcos blancos. Las fotos de sus papás eran de su boda y mi sorpresa fue que se veían iguales a como los vi en la entrada, jóvenes, pero lo más sorprendente fue los ojos de su madre, eran iguales a los de Nessie pero cuando yo la había visto hace unos momentos sus ojos eran dorados como … los de toda su familia…

-eamm Nessie… ¿por qué toda tu familia tiene los ojos dorados? – ella se encontraba atrás de mi junto con Jacob y como no recibí respuesta me gire para verlos. Ellos se miraban preocupados como si hubiera sido una pregunta prohibida, o tal vez, solo tal vez era algún secreto de familia. Fue Jacob el que hablo por Nessie.

-Lo que pasa es que la familia de Nessie tiene como que una enfermedad en común, es una cosa rara y única en el mundo, solo ciertas personas al llegar a una edad sus ojos se empiezan a aclara es como si trajeran lentes de contacto, no es genial? – dijo él con tono despreocupado, pero la mirada que Nessie me daba me hacia no creerles pero no podía desconfiar de ella, porque si me había contado su secreto de que ellos andaban, pues que una rara enfermedad que todos ellos tuvieran en común debía ser totalmente cierto.

-Mejor vamos a mi cuarto, debo de tener algo interesante y dejare de aburrirte con fotos familiares Giz – Nessie me tomo de la mano y me guio hasta la puerta que daba enfrente al cuarto de sus papás.

Los demás cuartos que había visto eran de un color blanco con azul claro, pero el de Nessie era tan rosa, que mi primera reacción fue un “woow”. Su cama era enorme, de hecho parecía que su cuarto era al más grande de todos, a un costado de su cama estaba un gran tocador rosa con un mega espejo. Su ventana abarcaba toda la pared y en donde no había ventana estaba un a puerta que es a donde me dirigió.

-Mi abuela Esme arreglo todo mi cuarto pero mi tía Alice fue la que organizo todo mi closet, a ver que te parece – por el tamaño de la puerta imagine que seria del mismo tamaño que el mío pero en cuanto lo abrió parecía que hubiera entrado a alguno de los cuartos que ya había visto, era enorme. En el fondo alcance a ver que los zapatos estaban acomodados en pequeñas estanterías de cristal, a los costados habían blusas y chamarras acomodados por ¡colores! Y en medio había pantalones y faldas. Cuando mire atrás vi que en la puerta había otro espejo, seguramente ahí veía si la combinación era correcta.

-Cielos, Nessie tu casa es como un sueño hecho realidad, tienes una familia que te ama y tienes toda la ropa que una chica desearía… no entiendo por que eres así?

Me miro preocupada - ¿Cómo así? ¿A que te refieres? –me pregunto

-Así de buena persona, nadie en la escuela me había hablado desde hace un año, incluso cuando pudiste haberte ido con las chicas populares fuiste directo a mi mesa y me hablaste… ¿por que? – era algo que no podía comprender, que podía tener yo de especial para que una chica que lo tenia todo se juntara con la chica rara de la escuela, la solitaria.

-Porque se lo que se siente que los demás te vean como diferente – me abrazo lo que no me esperaba - cuando te vi sentí que necesitabas compañía – si quería tener una amiga sincera, la había encontrado.

Jacob entro en ese momento al cuarto y rompió el silencio con una gran risa.

-Hey Nessie ¿te acuerdas de este peluche? Te peleaste con Alice en una subasta por el – su risa invadió la habitación, ella también se reía del comentario que Jacob había hecho.

-¿Qué dicen si patinamos un rato en el pasillo? – Levanto unos patines que habían en una esquina de la habitación – estoy seguro de que Emmett y Rosalie tienen un par por ahí en su cuarto – mostro una gran sonrisa a Nessie y ambos me miraron

-Supongo que es buena idea – vi como Nessie reía un poco y salió del cuarto regresando en un minuto a lo mucho con dos pares de patines, uno se los dio a Jacob y el otro me los dio. Nos pusimos los patines.

Empezamos a patinar de un lado a otro en el gran pasillo, tenia que admitirlo, algo tan simple tan improvisado me hacia sentirme bien, me hacia sonreírle a las personas que patinaban conmigo, era de verdad, ni yo misma me lo creía, me sentía diferente con ellos por alguna extraña razón, aun sabiendo que no tenia ni una semana de conocerlos y eso me gustaba.

Iba detrás de Nessie e iba a dar vuelta en la cuerva pero por pensar en otras cosas me deslice un poco más de lo que debía.

Solo sentí mi cabeza dando vueltas cuando termine en el descanso de las escaleras.

Escuche a Nessie hablarme pero cuando abrí los ojos no la vi a ella, ella no estaba ni las escaleras por donde había caído.

Me puse de pie pero no estaba donde tenia que estar, seguramente estaba alucinando porque lo que ahora veía era un túnel, no como los túneles que supuestamente la gente dicen ver cuando están muriendo, yo no creía en esas películas que muestran esas escenas. Toque la pared húmeda de ladrillos grandes negros, el piso estaba un poco mojado, atrás de mi había una puerta de madera un poco vieja intente abrirla pero no cedió.

Al otro lado del túnel estaba poco iluminado no había más que unos dos candelabros pegados a la pared a la mitad del pasillo, camine lentamente hasta el otro lado, tenia miedo de no saber en donde estaba si estaba alucinando quería dejar de hacerlo y regresar a la realidad.

Cuando iba a abrir la puerta escuche unas voces al otro lado, no lograba entender bien que era lo que decían, respire hondo y gire la perilla. Estaba totalmente oscuro, si en el pasillo se alcanzaba a notar un poco el lugar con la poca luz, en la habitación si es que eso era, no se veía nada pero finalmente distinguí unos pequeños focos rojos. Camine hacia ellos pero algo sostuvo mi mano; me asuste mucho porque no veía quien era, sujetaba mi mano con demasiada fuerza y me estaba lastimando, me jalo y se acerco hasta mi, sentía su respiración en mi cabello.

-No podrás correr por siempre Gizem – la voz era suave pero me helo los huesos. Intente mirar su rostro pero no veía nada, entonces se escucho cerrar una puerta y el silencio quedo opacado con gritos que llenaron el cuarto pero no eran míos porque mis labios estaban juntos temiendo que si los abría podría empezar a gritar, yo seguía callada, con miedo de lo que me pasaría.

Algo caía por mis mejillas, estaba llorando de miedo, reconocí una voz en particular entre tanto grito, era el de mi madre, ella también estaba en esta oscuridad. Gritaba mi nombre y por más que quería abrir mi boca y gritarle que corriera que saliera como fuera de ese lugar no podía, quería que alguien me rescatara si, pero no quería que fuera mi madre porque sabría que ella moriría por mi así como yo lo haría.

Cerré mis ojos, temía que si los seguía manteniendo abiertos vería aquello que me estaba aterrando. La voz de mi madre se fue agudizando más y más y más y en cuanto más se acercaba más dejaba de parecer a la de ella.
Sentí la respiración de la persona que atormentaba mi mano muy cerca de mi, bajo desde mi cabello hasta mis mejillas, sentí su mano áspera en mi mejilla, limpiando mis lágrimas, lo escuche reír, no sabía lo que estaba pasando pero quería salir de ahí, quería que alguien me salvara.

-GIZEM!!! – fue lo último que escuche.

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